No sé si les ha pasado alguna vez que leen un artículo en una revista y les dan muchas, pero muchas ganas de tirarse por el balcón del departamento y ojalá que el cerebelo se rompa en mil pedazos para siempre.
Por suerte gana la cordura, pero esto no tiene nombre, de verdad. Aunque sé que debería tener este tema superado, la verdad es que NO LO SUPERO NI LO SUPERARÉ NUNCA.
En honor a los que son de los míos, los que trabajamos desde los 15 años, los que hemos tenido trabajos realmente despreciables, los que nos cortaron la luz y el agua cuando chicos (y cuando grandes), los que estudiamos 100% becados y tuvimos que terminar la carrera en plazo, sin poder vitrinear opciones para cambiarnos ni mucho menos perder un semestre, para los que mantenemos casas, pero especialmente para los que, a pesar de todo eso, luchamos por nuestros sueños y somos capaces de hacerlos realidad SOLOS SIN LOS PAPITOS, para los que pensamos que nunca íbamos a romper el círculo de la pobreza, pero lo estamos haciendo con gracia sublime, para los que pusimos empresa con el riesgo de perderlo todo, pero tuvimos éxito, para nosotros, para ustedes, amigos míos, hermanos de la vida que cada día somos menos, vaya este reportaje como recordatorio de que NUNCA debemos ser así. Somos pocos, sí, pero somos mejores. En mi vida casi no hay ninguno de ustedes, pero sé que existen y que un día nos conoceremos y nos dejaremos de sentir solos.
Click aquí (y tratemos de no tirarnos por el balcón aunque lo deseemos mucho).
Por suerte gana la cordura, pero esto no tiene nombre, de verdad. Aunque sé que debería tener este tema superado, la verdad es que NO LO SUPERO NI LO SUPERARÉ NUNCA.
En honor a los que son de los míos, los que trabajamos desde los 15 años, los que hemos tenido trabajos realmente despreciables, los que nos cortaron la luz y el agua cuando chicos (y cuando grandes), los que estudiamos 100% becados y tuvimos que terminar la carrera en plazo, sin poder vitrinear opciones para cambiarnos ni mucho menos perder un semestre, para los que mantenemos casas, pero especialmente para los que, a pesar de todo eso, luchamos por nuestros sueños y somos capaces de hacerlos realidad SOLOS SIN LOS PAPITOS, para los que pensamos que nunca íbamos a romper el círculo de la pobreza, pero lo estamos haciendo con gracia sublime, para los que pusimos empresa con el riesgo de perderlo todo, pero tuvimos éxito, para nosotros, para ustedes, amigos míos, hermanos de la vida que cada día somos menos, vaya este reportaje como recordatorio de que NUNCA debemos ser así. Somos pocos, sí, pero somos mejores. En mi vida casi no hay ninguno de ustedes, pero sé que existen y que un día nos conoceremos y nos dejaremos de sentir solos.
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2 comentarios:
Pucha Lu, no cumplo con todas las caracterísitcas para ser de los tuyos!! jajaja estudié 2 carreras y no tuve 100% beca, que créeme que en Chile son demasiado pocos lso que tienen 100% beca y aunque todos obtuvieses 1000 puntos, también los mandarían al sistema crediticio...
pero el reportaje ese es un chiste de pésimo gusto, es una forma de ignorar tantas realidades generalizando una sola....
jajjaa yo ni pude leerlo entero :-p
En Realidad se da el caso no solo en estratos pudientes a menor escala tambien .
EL QUE PUEDE PUEDE
asi de simple .
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