22 de octubre de 2010

Todavía lloro

al recordar el mejor día del año sin duda alguna. Bon Jovi en Chile.

Mi amigo Alejandro estuvo en cancha y como no es gran fanático, se dedicó a grabar, hahahahaha. Acá tenemos Livin' on a prayer, un himno, un clásico, una de las mejores canciones de Bon Jovi y, por supuesto, una de mis preferidas.

Cuando pienso en este sueño cumplido me lleno de alegría y se me pasan todos mis enojos.

Mi vida seguirá teniendo momentos así de gloriosos, pero éste será atesorado como uno de los más especiales, sin duda alguna. Los años no podrán desgastar la felicidad de ver a tu grupo musical en vivo después de 15 años de haberlo soñado.

Y eso es lo bueno, porque podrán venir miles de terremotos más, pero Bon Jovi seguirá intacto en mi corazón.

Y para seguir viviendo la vida a concho, qué mejor que disfrutar de mis tradicionales vacaciones de fin de año en la playa. Esta vez el destino se nos puso más caro de lo normal y más exótico, pero 100% deseado. En honor a la pequeña Luisa que sacaba los folletos del Almac (uh, se me cae el carné pesado) que promocionaban un destino que hace 18 años nadie conocía, nos vamos a ese lugar, el que más me cautivó en las fotos: Punta Cana. Con mi hermana.

A gozar, a gozar!!!! It's my life and it's now or never.

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