Hoy fui a la feria del libro con mi mamá. Tenía una invitación para un lanzamiento (Libro Hombres, de Isidoro Loy) que me dio la Marru, así es que partimos para allá.
El lanzamiento estuvo piola, aunque un poco largo. El paseo por la feria no tanto: había extremadamente mucha gente y yo empecé a entrar en pánico, recordando por qué hace un par de años juré no volver a la feria en fin de semana.
No es que odie a la gente, pero sí a la masa.
Los libros estaban igual de caros que siempre, ninguna maravilla. Algunas promociones para llevar varios volúmenes, otras ofertas de ediciones de bolsillo, pero nada muy digno para quien lleva 3 luquitas, jajajaja, super cagá.
Me quedé pensando que para poder tener un stan ahí, deberíamos contar como con 20 títulos al menos en la editorial. Como para que no se nota pobreza... Por lo mismo calculo que nos tomará bastantes años antes de conseguir siquiera compartir alguno de esos solemnes cubículos.
Enrique Lafourcade tiene el suyo... quién dice que algún día Visceralia no consiga lo mismo, eh.
Pensaba poner fotos, pero esta cuestión se demora 200 en cargar, y una tiene una vida allá afuera.
Ps: Una vida, pero de las otras
2 comentarios:
"Estuve aquí, 2005"...ø
No me weí po
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