25 de octubre de 2008

Sabatina

Me pregunto dónde está. Dónde vive, dónde puedo encontrarlo.

Si existe. Si existió. Si fue algunos de los que conocí (lo que sería trágico, pero explicaría muchas cosas).

Me pregunto por qué y tabién para qué. Cómo. Con qué con cuáles con quiénes.

Observo a los demás y los maldigo por lo propio.

Me dejo maravillar por la escritura de algunos, del mejor en realidad, del que tiene más futuro y más taleto. Del único de entre todos los que fuimos. Lo pueden leer acá.

En paralelo, mientras no me trabajo a los que trabajo para otras, busco a los que cobran. Conozco el precio de mercado.

Cobro las palabras de los sabios master ya ofrecida y me calmo.

Tomo siempre lo que me ofrece la vida.

2 comentarios:

Martín dijo...

Primero lo menos importante Luisa, que por eso mismo es quizá lo menos repetido. Me gusta esto porque huele poco a periodista. Hablando estructuralmente, pero tb despojado, sensitivo, carnal. Por eso disfruto este, y lo de arriba. Te quedó una primera persona bonita, y te salteaste el picnic que representa hablar sobre "los que cobran". Que berenjena esa ¿no? Lo otro: tranquila, la vida ya regalará cosas mejores Luisi (tener la esperanza al menos) Y... no se que decir, me impresionó muchísimo eso que decís de moi, lo leí hoy a la mañana y fue como demasiado. Que se yo. Extraño que alguien (vos, cualquiera) piense eso. Gracias. jajaja

Un beso grande! El futuró ya llegó... :)

Luisa Ballentine dijo...

Life is bigger, nene. You know. Y Luisa no dice mentiras en su blog, todo real. Aunque en metáforas, todo real. Igual la gracia es que lo extrañes de mí, que soy entendida, no de cualquier aparecido. No me gustó eso, jajajaja. No, no, broma. Broma de hermana gorda que te kere.

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